Archiduque Luis Salvador de Austria. Las Baleares por la palabra y el grabado. Mallorca: Parte General. Ed. Sa Nostra, Caja de Baleares. Palma de Mallorca. 1.982.
Los carros de transporte mallorquines son parecidos a los italianos. También reposan sobre dos ruedas y disponen lateralmente de una barandilla formada con palos (“parabandes”). Generalmente son de color azulado y siempre llevan un solo animal de tiro. El mulo o caballo se engancha a la horquilla mediante una collera de cuero.
Una forma más pequeño del “carretó” es el “carretet”, que es realmente muy pequeño, reposa sobre muelles y su interior está forrado con tela encerada. Dispone también de “vela” aunque esta no suele usarse mucho. Son tirados por pequeños caballos importados principalmente de Valencia y son muy comunes con tendencia a ir en aumento. Sus propietarios acostumbran a ser pequeños comerciantes de Palma, tenderos, etc. que se sirven de los “carretets” para acudir a casas de campo vecinas o para pasear en domingo
Las “galeretes” que en Palma se usan como coches de alquiler son bastante comunes en otros lugares y consisten de una armazón trenzada pintada por lo general de verde oscuro, con barandas de madera de refuerzo, que descansa sobre muelles de hierro y cuenta con cuatro ruedas. Sobre la armazón se extiende un techo de lona en forma de bóveda. En la parte delantera dispone de dos asientos, uno para el cochero y otro para un viajero adicional. Este asiento suele estar forrado de una piel resistente que se puede retirar con facilidad. La puerta de acceso se encuentra en la parte trasera y los asientos interiores están adosados a las paredes laterales.
De muy parecida construcción a la “galereta” son las “galeres”, vehículos pesados utilizados por los propietarios más acomodados para los traslados a Palma y desde la capital a sus “possessions”, tanto de mercaderías como de las personas a su servicio e incluso de ellos mismos. Están pintados siempre de color gris y cubiertos de una lona blanca al estilo de los carros. Por lo general carecen de muelles.
El omnibús es otro vehículo destinado al transporte de personas aunque reservado a propietarios de fincas muy acomodados. Consiste en una armazón trenzada con techo absolutamente llano y lacado. La disposición de la puerta, asientos y ventanas –hay hasta tres laterales- es muy parecida a la de las “galeres”, aunque en conjunto todo el vehículo es más pesado y sólido. Hay omnibuses para 4 y para 8 personas, sin contar los dos asientos delanteros, que pueden estar protegidos por una cubierta de piel. Van tirados por cuatro mulas o en caso de distancias cortas o viajes por la ciudad por dos. Raro es ver un omnibús tirado por tres animales y si así ocurre es porque una de las mulas ha caído enferma."
Font: Nixe III. Pasado, presente y futuro del mar Mediterráneo
Desde que "Ultima Hora" tuvo la delicadeza de abrir en la página 4, esta ventana que asoma a El Terreno, el que esto escribe, ha recibido muchas llamadas telefónicas, y también personalmente, muchas felicitaciones, porque a todo el mundo, gustale quitarse años de encima. Así, los que siendo noveles Padrins con su medio siglo a cuestas, podrán ilustrarle al nietecillo, que él va fer paperot a raiz de festejar su 1ª Comunión, por mor del gremio de Carrilers que le hicieron una faena a Mestre Campins, es Cotxé d'El Terreno. La cosa fue así.
Un tal Mestre Andreu, qui anava a jornal para cuidar y regar los frutales y jardines de la mayoría de veraneantes ubicados desde el callejón de Ca Na Bordoia (actual calle de las Bayonetas) hasta la calle de Santa Rita i fent partió amb sa costa de Bellvé, el pobre, tenía feina senyalada, por cuanto entonces El Terreno era considerado So'n Sec. Había que sacar el agua a força de poelades. Hombre enjuto, de Puigpunyent. Muy buena persona, viudo y cargado de hijos. Su esposa murió de parto, y el varón no nato que por cierto al bautizarle le pusieron por nombre Ramón, fue el mimado de todos, quizá por su infortunio. Es nin, aprendió Lletra, yendo a Ca Ses Monjes. Al cumplir los 7 años se le preparó para recibir la 1ª Comunión la cual debía celebrarse en nuestra Iglesia de la Salut, el mismo día de la fiesta patronal de 1917.
En nin de ca Mestre Andreu, recibió muchos regalos en especie y en metálico, y Mestre Andreu, invitó a su vez a tan generosos donantes por si querían asistir a n'es combrég d'es nin. Por ello, concertó amb es cotxé d'El Terreno un cierto número de galeretes. Ese a su vez se hubo apalabrado con otros cocheros de Ciutat. Al atardecer del viernes día 7, la Agencia Mulet recibió un cablegrama anunciando para el día siguiente el arribo al Puerto de Palma del vapor sueco "Stella Polaris" con un número importante de pasajeros que deseaban visitar la ciudad y alrededores. Los propietarios de carruajes de punto, advirtieron a Mestre Campins, cancelando lo tratado, debido a "fuerza mayor". Si el cochero titular de El Terreno no tuvo un ataque de apoplegía debió ser a causa del consumo de ajos crudos que consumía. Fue aquella misma noche a visitar a don Antonio Bonnín, almacenista de harinas que todavía veraneaba en El Terreno, y por ser directivo de la Cía. de Tranvías le pidió por todos los santos del cielo, quisiera alquilarle dos tranvías eléctricos. Uno con salida desde la Plaza de San Antonio y el otro desde Cort. El señor Bonnín, aceptó, conviniendo que luego a la hora del pago ya se decidiría el más justo. Luego bajó a Palma y fue visitando a los convidados por mestre Andreu, contándoles lo sucedido, cosa que ignoraba el jornalero. Sa cosa ja está feta. Sols vosté m'han de fer quedar bé.
Aquel Combreg fue el más sonado. Mestre Andreu no se enteró hasta que todo fue consumado. Don Antonio Mulet y Gomila, primogénito del Consignatario, veraneantes del Terreno, quiso hacer ofrenda de aquel servicio, pero la junta directiva de la Compañia formada en aquel entonces por los señores D. José Tous Ferrer, Gabriel Esteva de Can Boscana, Antonio Bonnín y Segura y don Pep Socias, en modo alguno permitieron el dispendio del señor Mulet. El asunto quedó en Tablas. El cochero Campins llego a un arreglo con Amador. Ambos fueron los titulados de prestación de servicio de todo cuanto vapor turístico recalara en Palma consignado a la Agencia Mulet.
Font: Estampas de El Terreno